Gestión de residuos_

Gestión de residuos_

 

Gestión de residuos

“En Chile se generan 17.000.000 de toneladas de residuos aproximadamente al año y sólo el 10% se recicla. El 17 de mayo de 2016, se promulgó la Ley de Reciclaje y Responsabilidad Extendida del Productor (REP), que en lo esencial obliga a fabricantes e importadores de seis productos prioritarios a recuperar un porcentaje de ellos, una vez que terminan su vida útil (es decir, cuando se transforman en residuos).

 

¿Qué productos prioritarios regula la Ley Rep.? 

  • Aceites Lubricantes
  • Baterías
  • Eléctricos y electrónicos
  • Neumáticos
  • Envases y embalajes
  • Pilas

 

¿Por qué reciclar y cumplir con la Ley Rep.?

– Aprovecha los recursos presentes en los materiales reciclables.

– Evita la sobreexplotación de recursos Naturales.

– Disminuye los costos de disposición final de los residuos.

– Crea nuevas fuentes de trabajo.

– Promueve la participación ciudadana en campañas masivas y proyectos de reciclaje.

– Disminuye la emisión de CO2. 

 

Ley 21.368: Plásticos de un sólo uso

 El impacto medioambiental del plástico provoca daños irreparables en los ecosistemas, por eso, lo que debemos hacer hoy es: reducir, reutilizar y reciclar. 

 

¿Cómo identificar los 7 tipos de plásticos? Los plásticos se clasifican según su composición y para identificar el tipo de plástico que reciclaremos, debemos reconocer el número dentro del signo de reciclaje inserto en cada envase. 

 

¿De qué depende que los plásticos sean reciclados? 

  • Depende de la composición de su resina, según el número identificado en el envase. 
  • Del mercado existente para poder procesarlo a gran escala.
  • De sí existe la posibilidad de crear un nuevo producto. (Eco Diseño)
  • De sí existen regulaciones para fomentar el reciclaje, como la Ley Rep.

 

Plástico del tipo Pet1: Pet o tereftalato de polietileno

  • Lo encuentras en envases de bebida, alimentos y productos cosméticos.
  • Es el tipo de plástico que más se recicla en Chile. 

 

Plástico del tipo 2: Pead o Hdpe, Polietileno de alta densidad. 

  • Lo encuentras en bolsas, envases rígidos de shampoo o artículos de aseo.

 

Plástico del tipo 3: PVC o Cloruro de Polivinilo

  • Lo encuentras en cañerías de construcción, cables, juguetes y una infinidad de productos.
  • Está hecho para una larga duración. 
  • Su contenido de cloro lo vuelve difícil de coprocesar (procesar junto a otras resinas), lo que impide su reciclaje a grandes escalas. 

 

Plástico del tipo 4: Pbe o Polietileno de baja densidad.

  • Lo encuentras en envoltorios de papel higiénicos y bolsas. 
  • Son envases más flexibles y no hacen ruido al tocarlos.
  • Generalmente, se reciclan como bolsas de basura. 

 

Plástico del tipo 5: PP Rígido o Polipropileno.

  • Lo encuentras en los envases de alimentos, cosméticos y tapas. 

 

Plástico del tipo 6: Ps o Poliestiereno

  • Es muy difícil reciclar este tipo de plástico por la poca salida que tiene este material.
  • Lo encuentras en envases de yogurth, embalajes de plumavit o envases de alimentos. 

 

Plástico del tipo 7: Otro 

  • Este tipo de plástico está fabricado con distintos tipos de resinas y materiales que pueden ser muy difíciles de separar, razón por la cual no son recibidos en puntos limpios, ni reciclados por plantas de valorización.

Cosecha de agua y tierra

Cosecha de agua y tierra

5.a. Cosecha de agua

La cosecha de agua se puede definir como “la recolección de escorrentía de lluvias para su posterior uso beneficioso”. Existen varias clasificaciones de técnicas de cosecha de agua, pero en un nivel más amplio, el término “recolección de agua lluvia” se aplica a aquellas técnicas que cosechan escorrentía de techos o superficies del suelo (flujo terrestre), y la “recolección de agua de inundación” se aplica a aquellas que recogen descargas de cursos de agua (flujo de canales). La clasificación podría ser más amplia, por ejemplo, en lo que se refiere a captar agua desde la humedad ambiental (atrapanieblas y otros), o de aplicar técnicas que incentiven la aparición de aguas subterráneas (vertientes).

“La cosecha de agua permite a agricultores almacenar agua cuando es abundante y ponerla a disposición cuando es escasa”. “Una amplia gama de técnicas de cosecha de agua está disponible y es aplicable en diversas condiciones geográficas. Muchas se originan localmente, y otras se han introducido desde otras regiones o países”.

Las técnicas de almacenamiento de cosecha de agua, van desde la acumulación de escorrentías para favorecer la infiltración del agua en el suelo, para el posterior uso de las plantas, o si éstas infiltran más abajo del sistema de raíces, alimentar los acuíferos y acumularse como aguas subterráneas. También, pueden almacenarse superficialmente con estanques naturales o artificiales.

https://www.fao.org/land-water/water/water-management/water-storage/en/

Food and Agriculture Organization of the United Nations.

En un contexto de escasez hídrica, las técnicas de cosecha de agua toman gran valor para la agricultura y la subsistencia.

 

5.b. Suelo fértil

“La fertilidad del suelo es la capacidad de un suelo para mantener el crecimiento de las plantas al proporcionar nutrientes esenciales para las plantas y características químicas, físicas y biológicas favorables como hábitat para el crecimiento de las plantas. Los nutrientes de las plantas incluyen los macronutrientes nitrógeno, fósforo y potasio, azufre, calcio y magnesio. Los micronutrientes son esencialmente boro, cloro, cobre, hierro, manganeso, molibdeno y zinc. Los fertilizantes son sustancias o materiales químicos o naturales que se utilizan para proporcionar nutrientes a las plantas, generalmente a través de la aplicación al suelo, pero también al follaje o a través del agua en sistemas de arroz, fertirrigación u operaciones hidropónicas o acuícolas. Las fuentes de nutrientes incluyen fertilizantes químicos y minerales, fertilizantes orgánicos, como estiércol de ganado y compost, y fuentes de nutrientes reciclados.”

La fertilidad ecológica del suelo puede definirse como la capacidad de un suelo vivo para sostener el crecimiento de las plantas, proporcionando los nutrientes, características físicas, químicas y biológicas favorables para su crecimiento. Teniendo en cuenta que en un suelo vivo ocurren los fenómenos de transformación e interacción trófica de macro y microorganismos presentes en él. Las prácticas de una agricultura sostenible considerarán principalmente la producción propia y/o local de materia orgánica, abonos naturales y del favorecimiento de los procesos ecológicos del suelo que permitan su continuo mejoramiento para sostener la fertilidad del suelo.

 

“Los suelos fértiles contribuyen a la seguridad alimentaria, los buenos rendimientos para los agricultores y el desarrollo económico de los países”.

https://www.fao.org/global-soil-partnership/areas-of-work/soil-fertility/en/

 

Cosecha de agua y restauración de suelo

En un contexto de escasez hídrica, erosión y pérdida de fertilidad de la tierra, las técnicas de cosecha de agua y suelo toman gran valor para la agricultura y la subsistencia. 

La cosecha de aguas lluvias permite acumular el agua cuando es abundante y aprovecharla cuando es escasa.  Las maneras de acumularlas van desde:

  • Contención del suelo, obras de terrazas y zanjas de infiltración, cobertura vegetal y reforestación. Esto permite que el agua se estanque e infiltre en el suelo, así es posible mantener la humedad en el suelo, alimentar acuíferos, que se recarguen las napas subterráneas y que se contenga el suelo para evitar erosión, aumentando su fertilidad. 
  • Captación y acumulación del agua de la lluvia en superficies como los techos. Almacenamiento en tambores, estanques y lagunas artificiales o naturales.
  • Atrapanieblas para captar las gotas de agua microscópicas de la neblina.
  • Aprovechamiento de aguas grises

 

Fertilidad del suelo

Es esencial asegurar la capacidad de un suelo de proporcionar nutrientes esenciales y un hábitat favorable para el crecimiento y desarrollo de las plantas. Para propiciar esto, las prácticas de una agricultura sostenible considerarán principalmente la producción propia y/o local de materia orgánica, abonos naturales y del favorecimiento de los procesos ecológicos del suelo que permitan su continuo mejoramiento para sostener su fertilidad.

“Los suelos fértiles contribuyen a la seguridad alimentaria, los buenos rendimientos para los agricultores y el desarrollo económico de los países”.

https://www.fao.org/global-soil-partnership/areas-of-work/soil-fertility/en/